Como explicamos en varios artículos, la ley de segunda oportunidad es una herramienta muy útil para solucionar problemas de sobrendeudamiento, sin embargo,
¿Es la única alternativa que tengo?
La ley de segunda oportunidad no es la única manera de solucionar un problema de sobrendeudamiento, existen otras vías. Como, por ejemplo, las negociaciones extrajudiciales, o las demandas contra los acreedores por usura en sus contratos o cláusulas abusivas.
¿Cómo puedo saber cual es la mejor solución para mí?
Es importante analizar al detalle la situación concreta de cada cliente, pues la ley de segunda oportunidad, es una herramienta muy útil, pero tiene muchas implicaciones que, si no se tienen en cuenta, pueden suponer un problema para el cliente.
¿Qué cuestiones deben valorarse para decidir si la ley de segunda oportunidad es adecuada para mí?
A modo resumen, lo primero que hay que analizar es cual es volumen total de las deudas que me afectan, y a partir de ahí, valorar con mucho detalle el patrimonio que tenemos: vehículos, viviendas, depósitos de dinero que estén a nuestro nombre…
Simplificando mucho este análisis, desde nuestro despacho recomendamos acogerse al procedimiento de ley de segunda oportunidad cuando el volumen total de deudas que tenemos, supere en más de un 20% el valor total de nuestro patrimonio, incluyéndose en el mismo todos los bienes que tenemos en propiedad.
La razón de llevar a cabo este análisis es, que salvo en el caso de haber podido alcanzar un acuerdo extrajudicial de pagos, o en contadas excepciones como en el de algunas viviendas hipotecadas, el procedimiento de ley de segunda oportunidad implica la liquidación patrimonio del concursado, lo que, en numerosas ocasiones, suele ser un sacrificio importante para el cliente que hay que ponderar para darle la mejor solución.
Otro análisis que debe realizarse es sobre el tipo de deudas que afectan al cliente, prestando especial atención a la existencia de contratos que puedan declararse nulos por aplicar intereses usurarios o por existir una falta de trasparencia. Es de vital importancia tener en cuenta esta comprobación, pues hay deudas que pueden verse reducidas considerablemente por estas razones.
¿Por qué con el mismo problema un despacho de abogados me recomienda la ley de segunda oportunidad y otro no?
Existen numerosas empresas que se dedican exclusivamente a tramitar procedimientos de ley de segunda oportunidad, por lo que, ante la duda, siempre van a recomendar este procedimiento para no perder al cliente, lo cual, a nuestro criterio, es una temeridad, pues como ya hemos explicado, la ley de segunda oportunidad es una herramienta muy útil, pero supone un sacrificio importante, de ahí la necesidad de analizar correctamente las circunstancias de cada cliente y hacerle una solución a la medida de su problema.
Desde nuestro despacho, realizamos un análisis exhaustivo de todos estos extremos, para facilitar al cliente la mejor solución para su problema, ya sea la ley de segunda oportunidad, o la negociación individualizada con los acreedores.